#TristeHistoria 👩🏻🦽🏥
En Septiembre del 2018, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), le echó a perder la vida a Vanessa Dib Velazquez, una mujer de 27 años en ese entonces, a quien le fueron amputadas las piernas, le extirparon el útero y un ovario tras un “error de diagnóstico”.
Fue al área de ginecobstetricia del Hospital General Regional del IMSS no. 1 de Querétaro, a donde acudió Vannesa, solo para quitarse el Dispositivo Intrauterino (DIU), sin embargo, jamás le realizaron previamente un ultrasonido o estudios de rayos X.
Tres días después, la víctima acudió a la Unidad Médica Familiar No 9, por un fuerte dolor lumbar, infección, como antecedente el retiro del DIU. Se le diagnosticó lumbalgia aguda perdió gravemente sangre, gastroenteritis infecciosa y deshidratación severa.
Esto provocó que fuera necesario proporcionarle respiración mecánica a la mujer, que la intubaran y una transfusión sanguínea, y debido al paro cardíaco que sufrió, requirió reanimación por 30 minutos, se le realizó extirpación de útero y ovario y, posteriormente, se le amputaron ambas piernas en el hospital del IMSS.
#Hoy 👩🏻🦽🏥
Vanessa quien ahora tiene 31 años menciona que al día de hoy julio 2022, todavía se someterá a una cirugía más para que le quiten el hueso de su pierna que le molesta, asimismo, Vanessa contó que el IMSS le ofrece los 88 mil pesos como reparación del daño, pero ni siquiera le ha ofrecido una disculpa por el daño que le causó.
“Me ofrecen 88 mil pesos por la reparación del daño, ¿Yo le pregunto a los médicos si eso valen sus piernas? Con gusto se los pago para que me regresen las mías”, resaltó Vanessa.
Vanessa exige que el IMSS le dé unas prótesis nuevas, un aumento de pensión porque tiene lo mínimo, reparación del daño y becas y talleres para sus dos hijos.